Amada soledad.


Amada soledad.

Cuanta rabia siento
no puedo,
vida, mi vida
¿Dónde queda?
quiero aprender
a no sentir más
no deseo entregar
sufro, quiero desaparecer
arrancar lejos.

No puedo...
deseo volver a empezar
es mi vida
y no la quiero así
es fea y desordenada
todo inconcluso
todo errado
camino entre fracasos
y no sé pararme.

No puedo...
quiero pero no puedo
son sólo las esperanzas
de un cielo nuevo
creo que es ya sin ti
tu me lo has hecho sentir así
algún día, sí
seré la única de alguien.

Te abrí mi corazón
y no lo apreciaste
soy sola y eso es mi aprender
mi soledad es mi compañía.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No sabes lo identificado que me siento con esta poesía... no lo sabes tú bien. Me estaba viendo en cada verso, diciéndome a mí mismo... "¡ése soy yo! ¡Vaya, si yo me digo eso mismo!" Estamos en sintonía, preciosa mía.

En cualquier caso, Feliz Año Nuevo y que, por lo menos, alguno de nuestros sueños y deseos para este año se haga realidad.

Un beso para ti con todo mi cariño.

Video de mi semana.

Tu beso se hizo calor, Luego el calor, movimiento, Luego gota de sudor Que se hizo vapor, luego viento Que en un rincón de la rioja Movió el aspa de un molino Mientras se pisaba el vino Que bebió tu boca roja. Tu boca roja en la mía, La copa que gira en mi mano, Y mientras el vino caía Supe que de algún lejano Rincón de otra galaxia, El amor que me darías, Transformado, volvería Un día a darte las gracias. Cada uno da lo que recibe Y luego recibe lo que da, Nada es más simple, No hay otra norma: Nada se pierde, Todo se transforma. El vino que pagué yo, Con aquel euro italiano Que había estado en un vagón Antes de estar en mi mano, Y antes de eso en torino, Y antes de torino, en prato, Donde hicieron mi zapato Sobre el que caería el vino. Zapato que en unas horas Buscaré bajo tu cama Con las luces de la aurora, Junto a tus sandalias planas Que compraste aquella vez En salvador de bahía, Donde a otro diste el amor Que hoy yo te devolvería Cada uno da lo que recibe Y luego recibe lo que da, Nada es más simple, No hay otra norma: Nada se pierde, Todo se transforma.